La leyenda de la mariposa azul nos recuerda que el presente y el futuro están en nuestras manos.
Cuenta esta leyenda oriental de la mariposa azul que, hace muchos años, un hombre enviudó y quedó a cargo de sus dos hijas.
Las niñas eran muy curiosas, inteligentes y siempre tenían ansias de
aprender. Constantemente asediaban a su padre con preguntas. A menudo el
hombre podía responder sabiamente, sin embargo, en ocasiones no estaba
seguro de poder ofrecerles a sus hijas una respuesta acertada.
Viendo la inquietud de las dos niñas, decidió enviarlas una temporada a convivir con un sabio
que vivía en lo alto de una colina. El sabio era capaz de responder a
todas las preguntas que las pequeñas le planteaban, sin ni siquiera
dudar. Pero, un día, las hermanas idearon una pícara trampa para medir
la sabiduría del sabio. Decidieron realizarle una pregunta que fuese
incapaz de responder.
La pregunta imposible
Las niñas se pusieron manos a la obra para llevar a cabo su plan.
La mayor salió al campo y atrapó una mariposa azul, envolviéndola en su
delantal para que no se escapase. A continuación, comenzó a explicarle a
su hermana cuál sería el proceder.
“Mañana, mientras sostengo la mariposa azul en mis manos, le preguntaremos al sabio si está viva o muerta.
Si responde que está viva, apretaré mis manos y la mataré. En cambio,
si afirma que está muerta, la liberaré y volará libre. De esta forma,
sea cual sea su respuesta, siempre será incorrecta”.
A la mañana siguiente las niñas acudieron al sabio, deseosas de hacerle caer en su trampa, y le formularon la pregunta. Pero el hombre sonrío tranquilo y calmado y procedió a responder: “depende de ti, ella está en tus manos”.
La vida es una mariposa azul
La leyenda de la mariposa azul nos enseña que somos los dueños de nuestra vida
y los únicos responsables de decidir qué ocurrirá con ella. A veces nos da la sensación de que no tenemos nada bajo control,
que no decidimos nosotras, sino la vida o los demás. Otras veces
responsabilizamos a los demás de lo que nos ocurre, o al propio karma. Y, en definitiva, no nos sentimos dueños de nuestro destino.
Pero no es cierto. Esta leyenda te enseña que tu vida está en tus manos, que tú decides, que el poder lo tienes de tú, que tú eliges cómo vivir tu vida, que tú eres dueña de tu felicidad.
Abre tu mano y deja que la mariposa azul vuele libremente, pero vuelve a
cerrarla y no dejes que se te escape ni un segundo de tu vida. Porque
ahora la riendas las llevas tú. El presente
y el futuro están en nuestras manos, tenemos la responsabilidad de
hacernos cargo de ellos. Pero también el poder de crear