Características
de Tian Gong
Tian
Gong es una línea de ejercicios de Qigong muy poderosa. Su práctica
es de gran beneficio
no sólo para mantener una buena salud y acondicionar malestares
físicos, sino también ayuda a mantener y promover la rehabilitación
del alma. "Qigong" significa "ejercicio de energía"
o " afinar la energía vital." Tian Gong logra, a través
de Qigong, la apertura del corazón para que el amor, la compasión y
la sabiduría se desarrollen.
Tian
Gong no se limita a una determinada religión o visión del mundo,
sino que es una corriente independiente abierta a la visión del
mundo de las diferentes culturas y las sabidurías más avanzadas.
Tian Gong se fusiona con todas las tradiciones culturales, con todas
las religiones, con los diferentes maestros espirituales; fomenta la
integración del patrimonio cultural de los diferentes pueblos y de
las diferentes religiones en la Tierra. En consecuencia, estas
diferentes herencias culturales del mundo también se integran en las
actividades de práctica y en los métodos de cultivación.
Estos ejercicios son apropiados para todos y traen beneficios a cualquier persona que los practique. Y sobre todo, lo que hace a Tian Gong único, es que los ejercicios de Qigong que el instituto Tian Gong Berlín practica son de gran beneficio para la regeneración del cuerpo, y el desarrollo del alma, sin embargo, los estudiantes pueden "solamente" practicar para la sanación del cuerpo.
Estos ejercicios son apropiados para todos y traen beneficios a cualquier persona que los practique. Y sobre todo, lo que hace a Tian Gong único, es que los ejercicios de Qigong que el instituto Tian Gong Berlín practica son de gran beneficio para la regeneración del cuerpo, y el desarrollo del alma, sin embargo, los estudiantes pueden "solamente" practicar para la sanación del cuerpo.
Esta
práctica del órgano corazón se puede hacer sentado o de pie.
Se
realiza en la estación del verano para fortalecer este órgano, ya
que el calor afecta a su funcionamiento.
Cerramos los ojos, durante la práctica de los órganos, se cierran los ojos para no dispersar la energía y se quede centrada.
Nos
ponemos en conexión cielo-cuerpo-tierra, pies separados a la misma
altura que los hombros, juntamos las palmas de las manos (los dedos
hacia arriba) delante del corazón, (estamos de 2 a 3 minutos).
1-
La pagoda celestial:
En
cada una de las manos cerramos los dedos índice y anular hacia la
palma de la mano, el resto de los dedos los dejamos extendidos.
Colocamos una mano hacia el cuerpo el dedo pulgar tocando el corazón,
la otra mano tocando el pulgar el entrecejo. Quedamos unos minutos de
4 a 5 en esa posición, si nos cansamos intercambiamos las manos, la
que está arriba la ponemos abajo y la que está
abajo
la ponemos arriba.
2-
Colocamos los dorsos de las manos encima de los muslos unos minutos.
3-
Extendemos los brazos horizontalmente, los codos ligeramente
flexionados, la cabeza mirando hacia el cielo unos minutos de 4 a 5.
Si nos cansamos colocamos las manos una encima de otra formando un
cuenco hacia nuestro cuerpo debajo del corazón. Nos vamos imaginando
que nuestro corazón se va haciendo grande y ocupando más espacio
cada vez, cuando se ha echo tan grande como el planeta tierra nos
imaginamos que poco a poco se hace más pequeño hasta que se hace
del tamaño de nuestro corazón.
4- Con la punta de la lengua, que es por donde pasa el meridiano del corazón, hacemos círculos por dentro de los dientes 9 veces en sentido a las agujas del reloj y otras nueve en sentido inverso, lo mismo hacemos por fuera de los dientes, manteniendo la boca cerrada, la saliva la tragamos despacio e imaginamos que va por el esófago al tan tien inferior.
5- Ho'oponopono:
Colocamos
los brazos cruzados en x sobre el pecho, las mujeres primero el brazo
derecho encima el brazo izquierdo, los hombres al revés. Llevamos el
mentón hacia el pecho. Decimos en voz alta las siguientes
palabras: Lo siento. Perdóname. Te amo. Gracias, lo siento.
Perdóname. Te amo. Gracias. Unos minutos.
6-
Ponemos las manos en forma de esfera, juntando los dedos de las dos
manos, empezamos en el tan tien inferior, a dos dedos por debajo del
ombligo, pensamos que el chi está en nosotros y nosotros estamos en
el chi, vamos subiendo hasta el tan tien del medio cerca del corazón,
pensamos lo mismo el chi está en nosotros y nosotros estamos en el
chi. Vamos haciendo el recorrido de arriba hacia abajo y de abajo
hacia arriba parando unos segundos en los tan tien.
7-
La zarpa del dragón. El dorso de la mano izquierda encima del muslo,
la mano derecha colocada encima del corazón realizando un suave
masaje, presionando las yemas de los dedos unos instantes cada vez
que se hace el masaje estamos unos minutos.
8-
El ave Fénix. Juntamos las manos delante del corazón, extendemos
los brazos de forma horizontal, los abrimos hacia atrás sacando
oxígeno de los pulmones, tenemos que sentir que tira el dedo
meñique, volvemos a juntar las manos delante del corazón a la vez
que inspiramos.
9-
Juntamos las manos delante del corazón extendemos los brazos hacia
arriba poniendo un leve pensamiento desde las plantas de
los pies al tan tien inferior (a dos dedos por debajo del
ombligo), bajamos los brazos hacia abajo poniendo un leve
pensamiento del tan tien inferior a las plantas de los
pies.
Cierre de la práctica.
Siempre hay que realizarla, cerramos los ojos, consiste en recoger la energía que se ha producido durante la práctica abriendo los brazos y hacer un círculo, colocar las manos por debajo del tan tien inferior, la mano derecha debajo encima la izquierda en el caso de las mujeres, en los hombres al revés, mantenemos unos instantes, hacemos círculos en el sentido de las agujas del reloj 18 veces y otras 18 veces en sentido contrario, alrededor del ombligo, frotamos las manos hasta calentarlas pasamos cada una por la cara haciendo 18 círculos en el sentido de las agujas del reloj desde la parte exterior hacia el medio de la cara y otras 18 veces en sentido contrario alas agujas del reloj, frotamos las manos y hacemos masaje con cada mano en cada riñón.
Juntamos las manos delante del corazón pedimos a los maestros del cielo que la energía que no sirve y que se ha producido durante la práctica sea reciclada y devuelta a nosotros, a nuestra familia, seres del planeta Tierra en forma de amor, luz, sanación, discernimiento, agradecemos flexionando la cintura hacia delante.
Cierre de la práctica.
Siempre hay que realizarla, cerramos los ojos, consiste en recoger la energía que se ha producido durante la práctica abriendo los brazos y hacer un círculo, colocar las manos por debajo del tan tien inferior, la mano derecha debajo encima la izquierda en el caso de las mujeres, en los hombres al revés, mantenemos unos instantes, hacemos círculos en el sentido de las agujas del reloj 18 veces y otras 18 veces en sentido contrario, alrededor del ombligo, frotamos las manos hasta calentarlas pasamos cada una por la cara haciendo 18 círculos en el sentido de las agujas del reloj desde la parte exterior hacia el medio de la cara y otras 18 veces en sentido contrario alas agujas del reloj, frotamos las manos y hacemos masaje con cada mano en cada riñón.
Juntamos las manos delante del corazón pedimos a los maestros del cielo que la energía que no sirve y que se ha producido durante la práctica sea reciclada y devuelta a nosotros, a nuestra familia, seres del planeta Tierra en forma de amor, luz, sanación, discernimiento, agradecemos flexionando la cintura hacia delante.
Advertencias
a tener en cuenta al realizar la práctica.
1. Los ejercicios de Qigong de la escuela Tian Gong no sustituyen ningún tratamiento médico.
2. No se debe practicar cuando haya rayos, truenos o vientos fuertes. No se debe practicar tampoco bajo la lluvia, y sin importar el estado del tiempo, no se debe practicar al aire libre en horas de la noche.
3. Es de gran importancia el ambiente del lugar en que se practica: este debe ser seguro y libre de ruidos. Igualmente, debemos entrar a la práctica con la mente tranquila y una actitud alegre, con una sonrisa durante toda la práctica.
4. No practicar más de 3 veces al día, ni practicar más de 2 órganos al mismo tiempo. Se recomienda dedicarle entre 3 a 6 meses a cada órgano por separado.
5. No practicar ni en estado de tener el estómago lleno ni con sensación de hambre, tampoco practicar inmediatamente después de haber comido. No ir al baño después de haber practicado (ir preferiblemente antes de la práctica) y no ducharse inmediatamente después.
6. Un tiempo ideal de práctica es de 30 a 40 minutos. Sin importar el tiempo de práctica, no salir del ejercicio sin cerrarlo, no abandonar abruptamente el lugar donde se está practicando y en lo posible, no reaccionar a factores externos como contestar el teléfono, etc...
7. En caso de que durante la práctica lleguen sentimientos de temor, utilizar un lenguaje delicado y autoreconfortante diciendo: "no hay razón para tener miedo, no hay nada de a qué temer"
8. No se recomienda la práctica de ejercicios a personas con enfermedades agudas, enfermedades mentales, epilepsia o a mujeres embarazadas.
1. Los ejercicios de Qigong de la escuela Tian Gong no sustituyen ningún tratamiento médico.
2. No se debe practicar cuando haya rayos, truenos o vientos fuertes. No se debe practicar tampoco bajo la lluvia, y sin importar el estado del tiempo, no se debe practicar al aire libre en horas de la noche.
3. Es de gran importancia el ambiente del lugar en que se practica: este debe ser seguro y libre de ruidos. Igualmente, debemos entrar a la práctica con la mente tranquila y una actitud alegre, con una sonrisa durante toda la práctica.
4. No practicar más de 3 veces al día, ni practicar más de 2 órganos al mismo tiempo. Se recomienda dedicarle entre 3 a 6 meses a cada órgano por separado.
5. No practicar ni en estado de tener el estómago lleno ni con sensación de hambre, tampoco practicar inmediatamente después de haber comido. No ir al baño después de haber practicado (ir preferiblemente antes de la práctica) y no ducharse inmediatamente después.
6. Un tiempo ideal de práctica es de 30 a 40 minutos. Sin importar el tiempo de práctica, no salir del ejercicio sin cerrarlo, no abandonar abruptamente el lugar donde se está practicando y en lo posible, no reaccionar a factores externos como contestar el teléfono, etc...
7. En caso de que durante la práctica lleguen sentimientos de temor, utilizar un lenguaje delicado y autoreconfortante diciendo: "no hay razón para tener miedo, no hay nada de a qué temer"
8. No se recomienda la práctica de ejercicios a personas con enfermedades agudas, enfermedades mentales, epilepsia o a mujeres embarazadas.
Fuente Instituto Tian Gong Berlin
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